Cuando a nivel nacional declaran las autoridades federales que se acabó el “huachicol”, hay respuestas inmediatas que desmienten la versión.
La madrugada de ayer fueron aseguradas seis unidades y una toma clandestina por parte de la Defensa Nacional y Seguridad Física de Petróleos Mexicanos, en un recorrido de vigilancia a la altura de San Lucas El Grande, para evitar el robo de hidrocarburo a la paraestatal.
En un operativo de reconocimiento en el LPG Ducto Pemex, personal de Sedena y Seguridad Física de la petrolera, observaron unidades estacionadas en aparente abandono, a la altura de la comunidad de San Lucas El Grande.
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Se aseguraron una camioneta Nissan, color vino, cuya parte trasera lleva dos contenedores estacionarios con capacidad aproximada de 500 litros; una camioneta NP300, marca Nissan, color blanco, misma que cuenta con una placa ayuntamiento de Jiquipilco, en sus redila transporta dos tanques estacionarios con capacidad de 750 litros y 800 Litros.
Una pipa con capacidad de 5,800 litros, marca Chevrolet, color blanco, razón social Green Energy (moviendo México); una segunda pipa con Capacidad de 6,300 litros, marca Ford F-150, color blanco, con la razón social Flama Gas, ambas unidades al 25% de su capacidad.
Una tercera pipa color blanco, marca Ford, con razón social Hidro Gas, con capacidad rotulada 5,800 Lts.; otra pipa, color blanco, marca Ford, pero rotulada como Gas Cero, con capacidad de 5,000 Lts, las cuales estaban vacías.
Los vehículos fueron puestos a disposición ante la autoridad competente y sellada la toma clandestina por personal especialista de Pemex.
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Por lo pronto, vale saber que todas las tomas clandestinas en ductos de gas LP que hay en México, el estado de Puebla concentra el 60.86 por ciento, de acuerdo a información del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM).
En su informe anual “Tomas clandestinas: ductos de hidrocarburo y gas LP 2021”, el observatorio ciudadano señaló el incremento en el registro de tomas clandestinas por donde pasan hidrocarburos de Petróleos Mexicanos (Pemex), donde Puebla e Hidalgo encabezan la lista.
Puebla en 2020 tuvo un registro de mil 639 tomas, y en el año 2021 fue de mil 462, lo que representó una disminución de 10.80 por ciento. Pero mantuvo en el primer lugar nacional en robo de gas LP, debido a que se identificó una toma clandestina cada 6 horas.
En el análisis se identificaron 61 municipios del país donde se lleva a cabo el robo de gas LP, de los cuales 18 son del estado de Puebla.
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Tepeaca encabeza la lista con 418 tomas clandestinas. Le siguen los municipios de San Martín Texmelucan con 149 tomas clandestinas, San Matías Tlalancaleca 142, Acatzingo 120, Santa Rita Tlahuapan (109), Los Reyes de Juárez (101), Amozoc (91), Acajete (80), San Salvador El Verde 74, Palmar de Bravo 54 y Quecholac 39, Coronango 22, Puebla 16, Esperanza 14, Tecamachalco 12, Huejotzingo 9, San Miguel Xoxtla 7 y Cuautlancingo 5.
De acuerdo con los registros de Pemex, en 2021, a nivel nacional, las tomas clandestinas en ductos de gas LP aumentaron 15.56 por ciento.
Respecto al caso de tomas clandestinas de otros hidrocarburos, como la gasolina, se identificaron 10 mil 251, lo que representó un incremento de 12.25 por ciento en comparación con 2020. El IGAVIM destacó en su informe que Hidalgo mantuvo el mayor número de tomas clandestinas en el país, seguido por Puebla.
En 2020, en Puebla se registró una toma clandestina en ductos de hidrocarburos cada 5 horas con 42 minutos.
De los 100 municipios del país donde se identificaron estas tomas clandestinas, Tepeaca también ocupa el primer lugar con 359, seguido de San Martín Texmelucan con 144; Acatzingo con 117 y San Matías Tlalancaleca con 117.
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Así como Santa Rita Tlahuapan con 85 tomas; Acajete con 84; Palmar de Bravo con 70; Amozoc con 69; Los Reyes de Juárez con 69; San Salvador El Verde con 59; Ahuazotepec con 55; Huauchinango 50; Jalpan 38; Quecholac 38; Coronango 36; Venustiano Carranza con 36; Puebla 27; Esperanza 25 y Tecamachalco 17.
En 2021 el monto estimado por reparación y/o inhabilitación de tomas clandestinas fue de 509 millones 540 mil 144 pesos, lo que representó un aumento de 4.17 por ciento en comparación con el monto destinado en un año antes, que fue de 489 millones 127 mil 502 pesos.
Hidalgo fue la entidad a la que Pemex le destinó más recursos, con más de 209 millones, después fue Puebla con 86 millones 391 mil 974 pesos para reparación y/o inhabilitación de tomas clandestinas.
IGAVIM destacó que este delito incrementa el riesgo para las personas y se multiplica si no se previene, desde los diferentes órdenes legales de planeación, el fortalecimiento del tejido social, la cultura de la legalidad y la eficiencia en la resolución de las denuncias.
La realidad es contundente, Puebla es un estado huachicolero.
De las anécdotas que se cuentan
El 21 de enero pasado, el abogado y ex diputado de Morena, Juan José Soltero Meza, fue objetivo de un atentado en Guadalajara, Jalisco, mientras conducía su vehículo. Faltaba poco para el mediodía y mientras circulaba por Jardines del Bosque, cerca de su despacho, le dispararon a la cabeza e increíblemente, no le alcanzaron de lleno al cráneo.
Un sicario le disparó desde una motocicleta y dañó la carrocería, así como el parabrisas. Mientras era atendido en el hospital, el delegado de Morena en Jalisco, Favio Castellanos Polanco, lanzó la predecible condena: “Pido a las autoridades que hagan las investigaciones correspondientes para dar con los responsables. Lamentable lo que sucede en nuestro estado”.
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Algunos dicen que el atentado se dio por su cercanía a distintos personajes de Morena, pero hay otra especie que considerar: fue abogado defensor de Alejandrina Salazar, exesposa de Joaquín Guzmán Loera y del hijo de ambos, Iván Archivaldo Guzmán Salazar.
Jalisco es un territorio complicado, si se considera que ahí se mueven familiares y cercanos a Joaquín Guzmán, pero también de Nemesio Oseguera, feroz contrincante del cártel de Sinaloa y enemigo número uno de la DEA.
Dicen los que saben que, en los temas de delincuentes de alto impacto, hay dos tipos de abogados: primero, los que apuestan por el largo plazo para sus defendidos y no ofrecen milagros, sino ir debilitando poco a poco la causa en su contra, moviéndose con cuidado y trabajando en silencio, pero ofreciendo resultados tangibles.
Y, segundo, están los defensores que, además de ofrecer resultados inmediatos, terminan por aceptar sumas estratosféricas a cambio de fungir hasta en calidad de mandaderos de sus clientes especiales.
Mientras tanto, Jalisco es como tantas otras entidades, fiel testigo de un caos generalizado en el que la norma es el plomo y las leyes son para los textos especializados.
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