Lo que viene
En la democracia se gana y se pierde, y el domingo perdieron el presidente Andrés Manuel López Obrador y su grupo parlamentario, al no conseguir las dos terceras partes para llevar a cabo la Reforma Eléctrica, que es un objetivo fundamental de la Cuarta Transformación.
Pero, es indispensable asumir que no perdieron el poder y ahí vienen con todo para reivindicar su propuesta y sobre todo ganar en 2024 las elecciones de presidente de la República, la mayoría en el Congreso federal y los gobiernos estatales que estén en juego, entre ellos Puebla.
Sin ocultar su molestia López Obrador planteó ayer en Palacio Nacional, que el revés a su reforma se pudo evitar comprando votos, pero aseguró que no son iguales a los gobiernos de antes y señaló sin tapujos al de Enrique Peña Nieto en 2013.
"¿Qué vamos a hacer?, dijo el presidente. Comentaba yo que ya veíamos venir eso, claaaaaro, se pudo evitar si actuábamos como lo hicieron en 2013, que compraron los votos, pero no somos iguales, en 2013 obtuvieron mayoría absoluta, no hubo Oposición, porque repartieron dinero, por eso fue la llamada reforma energética, que es la reforma que nosotros estamos enfrentando. Ah, porque esto no termina todavía, esto apenas comienza", advirtió López Obrador.
En el proceso de seis meses, desde que se anunció la reforma y el domingo pasado cuando fue echado abajo el dictamen, hubo distintos momentos de negociación formal e informal.
Los priistas lo van a negar y la gente del presidente y de Morena fijo su respuesta al no negociar la sugerencia de que el gobierno le dejara tres de las seis gubernaturas de las que están en juego en junio próximo.
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Esa era la razón por la cual el dirigente del PRI nacional, Alejandro Moreno, insistía en que no se discutiré la reforma eléctrica hasta después de los procesos locales.
En Aguascalientes dan por descontada que Acción Nacional tiene ventaja, pero los priistas se veían con posibilidades de que les concedieran triunfos en Hidalgo, Durango y Oaxaca. La respuesta del presidente fue que eso no se negociaba y si las quieren las tienen que ganar en las urnas, además de que no les iban a dar recursos para conseguir sus votos individuales.
El PRI fue el último partido opositor en fijar su voto en contra de la reforma del presidente, por lo que estuvo coqueteando y ahora saben que enfrentarán todo el poder del Estado, como ellos actuaban en sus viejos tiempos, porque Morena va por todo el seis de junio.
El inquilino de Palacio Nacional mandó mensajes aprovechando la circunstancia:
"Pues yo creo que es un triunfo para la democracia, para demostrar que vivimos en un auténtico Estado de Derecho, que no hay un Presidente autoritario, que no hay corrupción, que se garantizan las libertades, yo así lo vería y que es un triunfo también para la política porque se avanza en el combate a la simulación, es espléndido un momento así, de los que se dicen representantes populares, votan por Iberdrola", indicó.
Su campaña contra la oposición como “traidores a la Patria” apenas empieza y puede continuar hasta 2024 cuando la 4T se juegue su permanencia.
En ese contexto, hay que entender las declaraciones del diputado Ignacio Mier Velazco, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, cuando dijo que las bancadas de la alianza “Va por México” (PAN-PRI-PRD) están en contra del dictamen de la reforma constitucional en materia eléctrica porque protegen intereses privados.
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“Le digo abiertamente al pueblo de México: están protegiendo intereses privados, están protegiendo el negocio de empresas mayoritariamente extranjeras, están queriendo que nosotros en el dictamen incluyamos la protección a contratos que nacieron en la ilegalidad”, externó el domingo.
El líder parlamentario insistió que varias de las propuestas planteadas por la alianza PAN-PRI-PRD estaban contenidas en el dictamen, con una redacción que obedece a la técnica legislativa, no a la narrativa expresada por esa alianza, “pero eso no lo entienden”.
Mier metió el dedo en la llaga cuando explicó porque el largo debate del domingo pasado, “no íbamos a hacer lo mismo que hizo el PRI y el PAN que en media hora votaron un dictamen que tiene que ver con la vida pública en México; la electricidad es sustantiva para la actividad humana”.
Lo que viene es el endurecimiento de las posiciones del presidente López Obrador, no cederá un espacio más a sus opositores y si tienen que ganarle tendrán que hacerlo con creces.
La campaña contra la oposición empezó ayer en Palacio Nacional y hará campaña diaria y en todo el país en ese sentido.
El presidente acusó a los legisladores de oposición que frenaron su reforma eléctrica de "vendepatrias", de haber traicionado al país, de defender a empresas extranjeras que roban y de respaldar el saqueo.
"Bueno yo considero que el día de ayer se cometió un acto de traición a México por parte de un grupo de legisladores que, en vez de defender los intereses del pueblo, de la Nación, en vez de defender lo público, se convirtieron en francos defensores de empresas extranjeras que se dedican a medrar, a robar y estos diputados respaldaron a los saqueadores, para decirlo con claridad", lanzó.
La orden es actuar contra su oposición como enemigos y no como adversarios.
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No sólo les ganarán elecciones, sino que si hay pruebas se actuará contra ellos y sus intereses personales, familiares y de grupo. López Obrador viene con todo.
De las anécdotas que se cuentan
Ya quedó comprobado en México que, si no existe el delincuente, se busca uno; sin embargo, ahora se dio una innovación penal: si no hay delito para meter en prisión a alguien, pues se le inventa uno. O, una conducta delictiva: qué tal, ¿garante accesoria?
El 28 de marzo, el Pleno de la Corte de Justicia de la Nación ordenó liberar a Alejandra Cuevas, así como cancelar la orden de aprehensión emitida en contra de su madre Laura Morán, acusadas de provocar la muerte de Federico Gertz Manero, hermano del fiscal general de la República.
Por unanimidad los magistrados consideraron otorgar ambas medidas, cumpliendo con lo que los expertos apuntaban de conceder el amparo liso y llano a una mujer de 95 años de edad.
Más lejos, se dijo que debería ser considerada “víctima de violaciones a derechos humanos, otorgándole una reparación del daño ocasionado por la mala actuación del Estado en su contra”.
Y así fue como Alejandra Cuevas abandonó el penal de Santa Martha Acatitla.
Sumidos en la desesperación para liberar a su señora madre, los tres hijos de Alejandra pusieron sobre la mesa de Alejandro Gertz Manero lo que tenían: se habla de obras de arte, dinero en efectivo y hasta la renuncia a la pensión mensual que Federico había dejado para Laura Morán.
Como se sabe, la autopsia no sirvió de nada, aunque señaló claramente que el hermano del fiscal murió por problemas de salud. Manos oscuras se encargaron de señalar que, en realidad había sido víctima de “Homicidio por omisión de cuidados”.
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En una entrevista, Alejandra comentó: “No había manera de que se me inculpara. Yo iba una vez a la semana a casa de mi mamá. Los acompañé una sola vez al médico, y todas esas declaraciones están hechas por los médicos de él (…) Yo no quiero que me ayude nadie”.
La justicia funcionó, pero no por los abogados que fueron quedando en el camino, amenazados desde la Fiscalía General. Parece que unos audios elaborados con calidad excepcional y filtrados a la opinión pública, fueron los que dieron resultado.
Ahora viene la reacción de Alejandro Gertz. Mientras tanto, en Palacio Nacional no se han percatado de lo que crearon, sin controles ni contrapesos.
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