Ahora, va por España

Del reportero

Puebla es, desde su fundación, una ciudad española con una gran comunidad de origen y miles de descendientes, tanto que sorprendió la declaración del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dijo miércoles y jueves que su gobierno se va “a dar un tiempo” en las relaciones con España.

“Una pausa para respetarnos y que no nos vean como tierra de conquista. Queremos tener buenas relaciones con todos los gobiernos del mundo, pero no queremos que nos roben, así como los españoles no quieren que les roben de ningún país. Y hacen bien. Pues tampoco lo queremos nosotros”.

Del mismo autor: Y sigue el problema


Sin venir a cuento soltó la advertencia durante su mañanera, el presidente comentaba aspectos de la reforma energética cuando se refirió a las relaciones con España y se lanzó contra varias empresas.

A mí me gustaría que hasta nos tardáramos en que se normalizaran [las relaciones]. Creo que nos va a convenir a los mexicanos y a los españoles. Desde luego al pueblo de México y al pueblo de España”, agregó:

“Era un contubernio de arriba, una promiscuidad económica, política, en la cúpula de los gobiernos de México y de España, pero como durante tres sexenios seguidos. Y México se llevaba la peor parte, nos saqueaban. Entonces, vale más darnos un tiempo, una pausa, a lo mejor ya cuando cambie el Gobierno ya se establecen las relaciones. Yo desearía que cuando no esté aquí no sean igual a cómo eran antes”.

López Obrador señaló a sus antecesores: “[Felipe] Calderón tenía a Repsol, Iberdrola viene de [Vicente] Fox”.

La declaración cayó como un balde agua fría en el país europeo, que representa el segundo con más capitales en México, el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, se sorprendió por las declaraciones.

En Honduras, Albares comunicó a Marcelo Ebrard la concesión del plácet al nuevo embajador de su país en España, Quirino Ordaz, que llevaba cuatro meses pendiente, lo que este agradeció públicamente.

Del mismo autor: La Reforma Eléctrica, va


"El Gobierno de España rechaza tajantemente las descalificaciones realizadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en los últimos días contra España y las empresas españolas", señaló este jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.

"España trabajará siempre por mantener las mejores relaciones con México y reforzar los lazos con este pueblo hermano. El Gobierno desea unas relaciones basadas en el respeto mutuo, como quieren los españoles y los mexicanos, sin este tipo de manifestaciones".

El diario español El País informó que “España es, tras Estados Unidos, el país extranjero de mayor inversión en México, con unos 76.000 millones de dólares, según datos publicados por la Secretaría de Economía para 2021, lo que representa alrededor de un 12% del total de la Inversión Extranjera Directa (IED), y la mitad son nuevas inversiones, aunque la relación comercial viene consolidándose desde hace décadas. Bancos y telefonías son las carteras más notables, aunque hay una gran industria turística de firma española. Hasta 6.856 empresas presentan inversión extranjera hacia México”.

Las declaraciones en las mañaneras tensan nuevamente las relaciones con España, como sucedió con la carta que en 2019 envió el presidente mexicano a Felipe VI exigiéndole que pidiese perdón por los abusos cometidos en la Conquista, un reclamo que no fue atendido por la diplomacia española por los términos en que fue dirigido, y que López Obrador tomó muy a mal.

“Cada vez que el presidente mexicano trae a colación los antiguos negocios de algunas compañías, como Iberdrola o Repsol, con anteriores gobiernos, el discurso se enturbia y las relaciones diplomáticas parecen agrietarse. El presidente se duele una y otra vez de los negocios que hicieron las grandes firmas energéticas y turísticas en territorio mexicano con el concurso de presidentes como Calderón, Fox y otros.

Del mismo autor: Puebla, estado “Huachicol”


“Estaban acomplejados, fascinados con la Monarquía”, declaró. “Nos conviene darnos un tiempo por lo que sucedió”, en referencia a las relaciones comerciales entre las multinacionales españolas y la petrolera estatal mexicana, Pemex, por ejemplo, donde el presidente ha relatado algunos pésimos negocios en los que la petrolera salió con muchas pérdidas.

Preguntado por la prensa sobre qué implicaban sus palabras exactamente respecto a la relación con España, dijo: “Es solo un comentario, una plática aquí, una conversación. ¿Que ya no puedo hacer comentarios?”.

Actualmente viven en México aproximadamente 21 mil españoles, aunque son más, casi 150 mil, los que tienen la nacionalidad española, adquirida por otras vías que ambos países han abierto debido a sus relaciones históricas.

Con el nuevo embajador mexicano, Quirino Ordaz, López Obrador habló de calmar las aguas y restaurar las buenas relaciones con España, todo parece que ese escenario ahora cambió, aunque insistió no es ruptura.

 

De las anécdotas que se cuentan

Dicen los que saben que la última estación para que un estado de la República sea gobernado por el crimen organizado es la feudalización, una condición en la que el gobierno funciona solo para temas administrativos y los cárteles son los que toman las decisiones relevantes.

En estas condiciones, los gobernantes legítimamente elegidos solo se comportan como meros funcionarios enfocados a tareas rutinarias y claro está, el cobro de impuestos legales, en el entendido que los delincuentes cobran a los ciudadanos otro tipo de impuesto, el cobro de piso o extorsión.

Así, la persona común, la que no tiene poder político, tiene dos opciones: mudarse de territorio y tirar por el vertedero a su trabajo o inversiones que le llevó años poder consolidar, o plantarles cara a los narcos, ya sean funcionarios o criminales de tiempo completo.

Del mismo autor: Mujeres, ¿por qué desaparecen?


Ésta última opción la tomaron los integrantes de la familia LeBarón el pasado 11 de enero, cuando enviaron una carta a Andrés Manuel López Obrador, para ponerle nombre a las cosas: el partido propiedad del presidente, Morena trabaja sincronizadamente con los cárteles de la delincuencia organizada.

De la carta, queda claro que la administración estatal panista de María Eugenia Campos Galván es eso, administración y no control del estado.

El presidente estatal de Morena, Martín Chaparro, ha optado por la descalificación y no por la seriedad, al señalar que la familia LeBarón emprendió una “vendetta” para conseguir su autonomía, tras haber advertido que la delincuencia organizada y el gobierno trabajan sincronizadamente en Nuevo Casas Grandes.

La lucha entre los LeBarón y Chaparro se da con epicentro en distintas comandancias de la zona de influencia de los primeros, ya que han denunciado que los policías también venden narcóticos, colaboran en sicariato y se concentran en la extorsión, no en el combate a la delincuencia, sin omitir que funcionan como halcones de los grupos delictivos, avisándoles cuando ven algún convoy militar cerca de su zona de influencia.

Chaparro se desgarró las vestiduras y se lanzó con todo contra los LeBarón, al señalar que el gobierno municipal de Nuevo Casas Grandes es honorable y ajeno a las deleznables prácticas que señala aquella familia.

Cabe mencionar que Morena en Nuevo Casas Grandes no envió ni sus condolencias a la familia LeBarón tras la masacre en su contra, en noviembre de 2019.

Del mismo autor: San Miguel, un reto dirigirlo


Y ahí está el caso de Ariel Ray, ex presidente municipal de Galeana, quien tuvo el atrevimiento de nombrar a su propio jefe de policía, lo que ocasionó que un cártel le recordara vía mantas, que ellos decidían quien sería el nuevo funcionario, no el alcalde.

Preguntando a los expertos, éstos dicen que Chihuahua lleva un siglo dominada por la delincuencia organizada y, las décadas de los ochenta y noventa del siglo XX fueron el clímax de ese control faccioso, con cientos de mujeres desaparecidas, muchas de ellas aún no encontradas.

Comentan los especialistas que, al finalizar el escándalo internacional por esas mujeres desaparecidas, el gobierno estatal comenzó una frenética labor de profesionalización en el área de seguridad pública, pero obtuvo dos resultados contradictorios: una envidiable gestión administrativa y la ausencia del Estado en las calles de Chihuahua.

Comentan que ése es el escenario más crudo que puede encontrarse en el futuro inmediato de México, una profesionalización de la seguridad que corre lejos de la inseguridad que sufren los ciudadanos, la esquizofrenia pública en pleno.

Los LeBarón alzaron la voz en Chihuahua.

Y mientras tanto, el país sigue en llamas, cayéndose a pedazos.

fcrisanto00@yahoo.com.mx

Twitter @fercrisanto

Facebook: Fernando Alberto Crisanto

 

*ARD