Puebla, Pue- La diputada local, Mónica Rodríguez Della Vecchia mantiene su postura frente a las declaraciones del alcalde panista de la capital del estado, Adán Domínguez que acusa una sobrerreacción de la panista, de quien dijo no entrará en “dimes y diretes”.
Della Vecchia reiteró que las críticas, señalamientos, descalificadores que haga el alcalde hacia su persona como militante o legisladora le son “irrelevantes”.
Incluso dijo que, si alguien tiene duda de su trabajo legislativo, el “vocero o el que lo manda”, esto en alusión a Adán Domínguez o Eduardo Rivera, ella está dispuesta a mostrar que siempre ha sabido ser oposición.
Dijo que sería interesante ese encuentro, porque tanto Eduardo Rivera como Adán Domínguez tendrían la oportunidad de explicar porque se perdió la elección del 2 de junio.
“Si Eduardo tiene duda de mi trabajo legislativo con mucho gusto lo recibo, le platico todo lo que he hecho como legisladora (…) lo que diga de mí el alcalde la verdad es irrelevante, el problema es que se metió con menores de edad para hablar de política cuando está prohibido”.
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Fue ayer cuando Della Vecchcia solicitó la doble intervención de la Fiscalía General del Estado (FGE) y a la Procuraduría del Menor, para que revisen y actúen en contra del edil de Puebla si se comprueba que utilizo a menores de edad, para hacer golpeteo político en su contra.
Esto luego de que Della Vecchia ha sido una de las militantes que ha pedido que el PAN reflexione sobre la derrota del 2 de junio, saber quiénes operaron en contra del partido y como militantes dejaron de actuar como oposición cuando más se necesitaba.
El “golpeteo político”, dijo la panista, es una práctica que está prohibida como norma en defensa de los derechos de niños, niñas y adolescentes.
*ARD