La crisis automotriz

Del reportero

Puebla es un estado que basa su economía en la industria automotriz y de autopartes, desde la década de los sesenta cuando se instaló aquí la planta alemana Volkswagen, son seis décadas de producción de vehículos que se fortaleció con la llegada de Audi en 2014.

Son miles los empleos directos que genera y los indirectos se multiplican de una forma extraordinario, desde el año pasado por la falta de insumos cayeron la producción y ventas, para 2022 las cosas no parecen mejorar, a pesar de los esfuerzos de los fabricantes.

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Si a eso se suma que, a pesar de los reclamos del sector automotriz, el gobierno federal abrió de par en par la entrada a la regularización de los autos provenientes del extranjero, además de las recientes modificaciones al decreto para la regularización de los “autos chocolate” emitido el pasado 19 de enero.

Los cambios, publicados en el Diario Oficial de la Federación, facilitan aún más el ingreso de este tipo de vehículos al país, la mayoría proveniente de Estados Unidos y amplían su vigencia al pasar del 20 de julio al 20 de septiembre de 2022.

Además, de los estados fronterizos originalmente beneficiados las modificaciones añadieron a Sinaloa y Zacatecas entre las entidades beneficiarias con estas medidas, con lo que son 12 los estados que podrán regularizar sus autos del extranjero tras un fácil examen y el pago de 2.500 pesos.

El decreto fue emitido el 19 de enero y en menos de dos meses el documento original ha cambiado al menos dos veces. En un primer momento, se contemplaba que los autos a regular debían tener como mínimo ocho años de antigüedad, sin embargo, ahora podrán regularizar unidades de modelos a partir de 2017.

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Antes, el proceso de regularización y verificación del automóvil extranjero estaría a cargo de la Agencia Aduanal Mexicana y la figura del agente aduanal, quien se encargaría de verificar físicamente la existencia del auto e integrar el expediente conforme al decreto y reglas para iniciar el procedimiento de importación, sin embargo, en la más reciente modificación, a fines de febrero, se eliminó esta figura y será solo un funcionario del Registro Público Vehicular quien dé el visto bueno del ingreso del automóvil foráneo.

Los empresarios vinculados a la venta de autos señalan que con estos cambios el procedimiento carece de mínimos elementos de control por parte del Estado para asegurar que los vehículos a legalizar no cuentan con reporte de robo ni sobre sus condiciones mecánicas.

El Gobierno federal ha pedido a los estados establecer condonaciones en impuestos para su emplacamientos para facilitar la regularización prometida, dejando en 2 mil 500 pesos el costo de cada regularización vehicular.

Estas unidades, una vez emplacadas, podrán circular y comercializarse, impactando en las cifras de una industria que apenas esperaban recuperarse tras la debacle de la pandemia, se oficializa la competencia desleal que representan los autos chocolate provenientes de EE UU se dejan de vender hasta 200 mil autos nuevos en México.

Pese a los cálculos del impacto económico por la regularización, el presidente López Obrador defendió el jueves una vez más el ingreso y registro de los llamados autos chocolate.

“Es lógico que los distribuidores de los carros no estén de acuerdo con la regularización de los carros extranjeros, es normal que ellos estén en contra de esta medida, pero nosotros consideramos que ayuda a mucha gente que no tiene para comprar un carro nuevo, de agencia, que ya tienen los carros que los utilizan para sus actividades productivas, para llevar a sus hijos a la escuela, y que además si están los carros, si no están regularizados, hay un descontrol y se utilizan esas unidades para cometer delitos, y hace falta tener un registro”, señaló.

El decreto de enero esgrimió que el aumento de delitos está vinculado con el uso de vehículos extranjeros que circulan de manera irregular en Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas, Baja California Sur, Durango, Michoacán y Nayarit. Mientras que la incorporación de Zacatecas y Sinaloa se justificó por la cantidad de población migrante que existe en estas entidades.

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Rocío Méndez Bautista, académica de la UNAM, señala que las últimas modificaciones resultan en un decreto laxo y que perjudicará a la industria nacional.

“El sector automotriz en México se ha visto seriamente afectado por la pandemia. Establecer un decreto en el cual se legalicen los autos chocolate en este momento no es lo más oportuno porque en lugar de que se fortalezca una pieza indispensable para la economía mexicana, se está priorizando otra que no es tan trascendental”,

Puebla sufrirá los estragos de esta medida pues, aunque no está entre las entidades donde se legalizarán los autos chocolate, lo cierto es que llegarán y lo peor es que dejarán de comprar unidades nuevas que se producen aquí, donde se originan piezas importantes para su armado.

No son los mejores tiempos para estados automotrices, como Puebla.

 

De las anécdotas que se cuentan

De madrugada fue detenido Rafael, “El Fantasma”, zacatecano de 32 años de edad que dirigía la maquinaria del Cártel Jalisco Nueva Generación en su tierra natal, desde Chihuahua.

La misión que Nemesio Oseguera le dio a este personaje no era fácil: liderar a sus tropas en Zacatecas, para enfrentar a las células que envió Ismael Zambada para arrebatarle la plaza.

Zacatecas tiene un enlace estratégico con la carretera federal 54, que conecta directamente a Colima, adonde se encuentra el puerto más codiciado para el trasiego de fentanilo.

Lo anterior no le distraía demasiado a “El Fantasma”: se daba tiempo para incrementar las metas del negocio; es decir, el cobro de piso, el secuestro y el trasiego de narcóticos. A este joven delincuente se le ocurrió que el secuestro podría rendir mejores dividendos si lo aplicaba a turistas y, efectivamente, así ha sido.

El jefe de la plaza en Zacatecas de Nemesio Oseguera tenía a sus principales encomenderos en Fresnillo, Jerez, Monte Escobedo y Tepetongo. Oculto desde Chihuahua, planeaba meticulosamente los secuestros que emprendía su personal.

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Justamente uno de esos delitos fue el que lo puso en la mira de las autoridades: a dos hermanos, Javier y Alejandra, los privó de su libertad cuando llegaron desde Los Ángeles, California, para pasar la Navidad de 2021.

Sin embargo, los 350 mil pesos que exigió a cambio de su libertad permitieron ir hilando su identificación por parte de las autoridades federales. Así terminó por expedirse la orden de arresto por secuestro agravado, desde un Juzgado de Control del Distrito Judicial de Jerez de García Salinas, Zacatecas.

Cuando se supo quién era el cerebro que estaba detrás del secuestro de los hermanos, comenzaron a unir información, funcionarios del Centro Nacional de Inteligencia, de la Comisión Nacional Antisecuestro y de la Secretaría de la Defensa Nacional.

Y así fue como una madrugada de febrero fue detenido “El Fantasma” en su domicilio de la colonia Cerro Grande de la ciudad de Chihuahua.

Se manejó justificadamente que su detención era un éxito, pues detrás del zacatecano había otros secuestros más, sin olvidar que era el responsable de los campos de entrenamiento de sicarios de CJNG.

Más lejos: se le consideró el autor de distintas ejecuciones y cuerpos colgados en Fresnillo, así como amenazas a gobiernos municipales y al estatal de Zacatecas.

Y así fue como un avión de las Fuerzas Armadas lo trasladó de Chihuahua hacia Zacatecas para quedar a disposición del juez, con la idea de que terminarían vinculándolo a proceso.

Supuestamente, “El Fantasma” había sido el encargado de coordinar la matanza de 16 personas en Pánfilo Natera y Fresnillo el 5 de febrero, porque trabajaban para Ismael Zambada, asociados con otro enemigo de Nemesio Oseguera, el Cártel del Noreste, una de las escisiones más importantes de los Zetas.

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Tiene sentido que los integrantes del Noreste estén asociados con Zambada, considerando que “La última letra” había dominado por años a Zacatecas.

Pero algo se apestó, un video subido en las redes sociales por parte de la gente de Ismael Zambada, informó que los muertos de Fresnillo y Pánfilo Natera no eran sicarios, sino inocentes.

En ese contexto, más de un analista se preguntó cómo se podía levantar a dieciséis personas, torturarlas, matarlas y luego colocarlas en las calles con todo y mensajes, sin que las autoridades se dieran cuenta.

Y no faltaron los que hicieron números, pensando si los casi cinco mil militares y efectivos de la Guardia Nacional que fueron repartidos en Fresnillo, Lázaro Cárdenas, Zacatecas capital, Calera, Guadalupe, Ojo Caliente y Valparaíso no habían sido suficientes.

Pues, la celebrada detención de “El Fantasma” se cayó muy pronto, de su detención a su liberación, no pasaron ocho días.

Desde su homilía cotidiana, Andrés Manuel López Obrador señaló que se actuará legalmente contra el juez que aprobó la excarcelación.

Para qué tanta planeación por parte de un grupo de funcionarios, militares y de inteligencia, si en una semana, “La puerta giratoria” soltó a un cuadro relevante de CJNG.

La respuesta se la dan ellos mismos. México es un territorio en el que la probabilidad de que se esclarezca un delito es del uno por ciento.

Con esos momios, la impunidad lleva mano.

fcrisanto00@yahoo.com.mx

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Facebook: Fernando Alberto Crisanto

 

*ARD