Kamala Harris está intensificando sus esfuerzos para atraer a los votantes masculinos en el contexto de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Su estrategia surge tras un llamado de Barack Obama a los hombres negros para que abandonen actitudes sexistas, un tema que ha cobrado relevancia para la demócrata.
Las encuestas actuales indican que el republicano Donald Trump mantiene una ventaja significativa entre los hombres. Una reciente encuesta del New York Times/Siena reveló que Trump supera a Harris con un 51% de apoyo frente al 40% de la actual vicepresidenta. Ante esta situación, Harris y su campaña están instando a los varones a alejarse del “bullying” machista que representa Trump y a respaldar a la candidata demócrata.
En un evento de campaña en Pittsburgh, Obama compartió algunas "verdades" que consideraba necesarias para la comunidad negra, afirmando que existían razones y excusas inventadas que reflejaban un problema más profundo: la reticencia de algunos hombres a aceptar a una mujer como presidenta.
Además, la campaña de Harris ha subrayado que la candidata se encuentra en “excelente estado de salud” y posee la resiliencia física y mental necesaria para asumir la presidencia. Joshua Simmons, médico de Harris, publicó una carta en la que destacó que su examen físico más reciente, realizado en abril, fue “normal” y que la vicepresidenta mantiene un estilo de vida activo y saludable.
Por su parte, Steven Cheung, portavoz de la campaña de Trump, también se pronunció al respecto, afirmando que “todos han llegado a la conclusión de que se encuentra en perfecto estado de salud y es ideal para ser comandante en jefe”.
Con información de AFP
*ARD