Izúcar, Pue. El pasado sábado, Izúcar de Matamoros vivió un momento de profunda espiritualidad con la llegada de la reliquia del Apóstol San Judas Tadeo, un evento que conmovió a la comunidad.
Manuel Ramírez Moreno, párroco de Santa María de la Asunción, describió la llegada de la reliquia como “las caricias de Dios” para la región.
La reliquia, que consiste en un fragmento del hueso del brazo del apóstol, arribó al municipio después de haber visitado varias arquidiócesis en el país, incluida la de Puebla. Esta visita se realizó con la autorización del Papa Francisco, quien permitió que la reliquia saliera del Vaticano.
Desde la mañana, feligreses de la región recibieron la reliquia con gran fervor. Con lágrimas en los ojos, flores, relicarios e imágenes del apóstol, cientos de devotos siguieron el recorrido de la reliquia desde la Avenida Oaxaca hasta el zócalo de la ciudad, donde se celebró una misa especial.
Los asistentes formaron largas filas, que rodeaban el zócalo, para poder ingresar a la iglesia de Santa María de la Asunción y recibir la bendición del Apóstol a través de la reliquia que permaneció en la parroquia de 8:00 a 17:00 horas, y luego se trasladó a la parroquia de Santo Domingo de Guzmán, donde estuvo disponible para los fieles de 18:00 a 23:30 horas.
Muchos creyentes expresaron haber experimentado una profunda paz y una emoción que les llevó a las lágrimas al acercarse a la reliquia, lo que consideraron una bendición para ellos y sus familias. La visita del Apóstol San Judas Tadeo dejó una huella imborrable en la comunidad de Izúcar de Matamoros.
*ARD