El pasado sábado, residentes de un pueblo pesquero del sureste de Islandia tuvieron que dejar sus hogares, luego de una posible erupción volcánica, pues las autoridades de defensa civil declararon el estado de emergencia en la región.
Por lo que, la policía decidió evacuar Grindavik luego de que la reciente actividad sísmica en el área se desplazó hacia el sur hacia la ciudad y el monitoreo reveló que un corredor de magma o roca semifundida, se extiende debajo de la comunidad, dio a conocer la Oficina Meteorológica de Islandia.
La ciudad de 3 mil 400 habitantes se ubica en la península de Reykjanes, a unos 50 kilómetros al suroeste de la capital, Reikiavik.
“En esta etapa, no es posible determinar exactamente si el magma podría llegar a la superficie y dónde”, dijo la Oficina Meteorológica.
Asimismo, elevaron su alerta de aviación a naranja, es decir, un mayor riesgo de una erupción volcánica, pues representan un grave peligro para la aviación porque pueden arrojar cenizas altamente abrasivas a la atmósfera, donde se pueden causar fallas en los motores a reacción, dañar los sistemas de control de vuelo y reducir la visibilidad.
Te puede interesar: Robó casi 8 mdd en fondos federales de apoyo por Covid-19 para comprar una isla privada en Florida
Cabe recordar que, una erupción en Islandia en 2010 dejó la interrupción de viajes aéreos entre Europa y América Latina de Norte, un costo de 3 mil millones de dólares, pues se cancelaron más de 100 mil vuelos.
En tanto, la evacuación se da después de que la región fuera sacudida por cientos de pequeños terremotos por dos semanas, mientras los científicos monitorean una acumulación de magma a unos 5 kilómetros bajo tierra.
Sin embargo, la alerta aumentó en las primeras horas del jueves, cuando un sismo de magnitud 4.8 sacudió la zona, obligando al complejo geotérmico Blue Lagoon a cerrar temporalmente.
Por lo que, la actividad sísmica inició en el área al norte de Grindavik donde hay una red de cráteres de 2 mil años de antigüedad, detalló el profesor de geología Pall Einarrson, al RUV de Islandia, pues el corredor de magma tiene unos 10 kilómetros de largo y se extienden.
“Los terremotos más grandes se originaron allí, debajo de esta antigua serie de cráteres, pero desde entonces (el corredor de magma) se ha ido alargando, pasó por debajo del área urbana de Grindavík y se dirige aún más lejos y hacia el mar”, dijo.
Con información de El Financiero
*ARD