Los niños o adolescentes que tienen un grado alto de conocimiento al resto, y son capaces de resolver ejercicios o entender conceptos avanzados, son considerados niños superdotados o genios.
De acuerdo con El Heraldo de México, los padres de familia, profesores y especialistas son quienes suelen confundir a un niño genio con sacar buenas calificaciones, ser aplicado, sociable o trastornos como la hiperactividad o falta de atención, incluso pueden considerarse distraídos, de ahí la importancia de tener un buen diagnóstico y atención psicológica.
Muchas veces, los niños genio sufren depresión social de sus familiares o de sí mismos, pues esperan más que el resto de la población, por lo que no hay que perderlos de vista, pues necesitan el apoyo y atención como cualquier otro niño.
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¿Cómo detectar si tu hijo es un niño genio?
De acuerdo con expertos de la UNAM, se debe hacer una prueba psicométrica, en la cual, si el resultado es mayor de 130, entonces tiene un coeficiente intelectual superior al resto, además, hay otra prueba que se realiza dentro de la Escala Wechsler.
Dicho test de inteligencia es para niños menores de 14 años y deben pasar 15 exámenes verbales, de razonamiento, memoria y velocidad de procesamiento, es decir, su capacidad para entender la información y responder.
Comportamientos de un niño genio:
- Aprender a hablar, leer o caminar antes de la edad promedio
- Suelen estar más adelantados a sus compañeros de clase
- Conviven con niños mayores
- Suelen ser distraídos o perderse en su mundo
- Les gusta tener tiempo a solas
- Son despistados y están en su mundo
- Son más sensibles
- Tienen buena memoria
Cabe resaltar que, es importante realizar un diagnóstico si presenta estos síntomas, pues no siempre se trata de ser un niño genio, también puede tener un Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad.
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En cuanto algunos mitos y realidades sobre los niños genio, se dice que aunque tienen una inteligencia superior, no necesariamente deben ser los mejores de la clase, pueden tener un bajo rendimiento escolar, porque los temas los aburren.
Continúan siendo niños, por lo que es un error presionarlos para estudiar sin parar o realizar cursos que consuman todo su tiempo, mientras que solo el 3 por ciento en México corresponde a niños genio, según con datos del Cedat.
Los niños genios, no necesariamente tienen mejor salud visual que el resto, solo el 17 por ciento usa lentes, menor al 30 por ciento de niños promedio, los niños genio son menos propensos a la obesidad, solo el 9 por ciento tiene este problema.
Por último, el potencial de un niño genio suele perderse por la presión de los padres o por ser mal diagnosticados.
*ARD