Para detectar signos, experta imparte conferencia sobre Violencia Vicaria en la UMAD

La violencia vicaria puede manifestarse a través de la manipulación de los hijos, o utilizarlos para dar al otro progenitor

Puebla, Pue- La violencia vicaria es la forma en la que se utiliza a los hijos e hijas y/o personas significativas para una persona, como un medio para dañar o producir sufrimiento; destacando que de manera general es perpetrada por los progenitores de hijos en común, y se presenta más frecuentemente cuando se decide terminar una relación o denunciar violencia ejercida en su contra, señaló María Olimpia Vega, en el marco de la conferencia “Violencia Vicaria”, dirigida a los estudiantes de la Universidad Madero.

Olimpia Vega enlistó algunos de los signos que delatan la violencia vicaria tales como: manipulación de los hijos, utilizar a los hijos o temas relacionados con ellos para dañar al otro progenitor, hablar mal del otro progenitor en presencia de los hijos en común, interrumpir los tratamientos médicos de los hijos con el fin de hacer sufrir al otro progenitor, entre otros.

Señaló que en este tipo de violencia no solo sufre la ex pareja, sino también los hijos resultan ser víctimas, ya que en ellos se presentan efectos físicos y psicológicos que marcarán su vida y desarrollo. Entre estos efectos se encuentran: abuso físico que en casos graves pueden incluso poner en riesgo su vida, baja autoestima, pérdida de motivación y problemas en sus relaciones interpersonales; por mencionar algunos.

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“Si bien es cierto que la violencia vicaria puede ser ejercida de forma indistinta por hombres y mujeres, la que se realiza en contra de la mujer es motivada en muchos casos por un sistema patriarcal en el que desde el seno familiar se normaliza el rol de dominancia y superioridad del hombre”, señaló.

Por último, la experta destacó que la violencia vicaria debe abordarse desde una perspectiva multidisciplinaria donde deben trabajar conjuntamente los servicios sociales, sanitarios, educativos, administrativos y judiciales, tanto para el progenitor que resulta víctima de este tipo de violencia, como para los hijos.

*ARD