Puebla, Pue- El Observatorio de Salarios de la Ibero Puebla, hizo un llamado a los gobiernos federales, estatales y municipales para que elaboren políticas públicas e iniciativas sociales que prioricen el bienestar integral de las y los adultos mayores.
Pues el envejecimiento exponencial de la población mexicana ha puesto en jaque a los sistemas políticos, económicos y de salud en el país. Tan solo en 1980, a nivel nacional la población adulta mayor alcanzaba 5.4 por ciento de la población total, para el 2020 ya era el 12 por ciento y se espera que para el 2050 llegue al 21.5 por ciento.
El académico y responsable de dicho observatorio Miguel Calderón Chelius, señaló que México es un país con altos niveles de pobreza, precariedad laboral y carencias importantes en los sistemas de salud, donde ventiló que Puebla se encuentra dentro de los últimos cinco lugares a nivel nacional con menos pensionados.
Mencionó que no se puede limitar la atención del estado a sólo la población adulta mayor, pues es un trabajo que implica garantizar la calidad de vida a todas las personas desde que nacen hasta que envejecen, para que, al llegar a esa etapa, puedan vivir con autonomía, independencia y calidad de vida.
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“Cuando hablamos de envejecimiento, no sólo estamos hablando de las personas adultas mayores de ahora, estamos hablando de todos y cada uno de nosotros. De los niños, los jóvenes y los adultos, y eso es importante entenderlo porque esto determina los retos a los que nos enfrentamos”, explicó el experto.
Por ello, organizaciones como el Observatorio de Salarios de la Ibero Puebla, instan al estado a generar un entorno adecuado para la vida de las personas en esa etapa a través del Informe anual del Observatorio de Salarios 2023: Política social y envejecimiento; evolución de los programas de apoyo para las personas adultas mayores.
En este rubro no existe un punto de partida claro, pero se sabe que a partir de los noventas los diferentes gobiernos federales y estatales intentaron implementar programas de bienestar social, que difícilmente dan cobertura a toda la población, y tienen diversos errores operativos que les hacen casi inaccesibles.
En el análisis se expone cómo la política social no sostiene por completo la demanda de espacios dignos y adecuados para la vejez, pues sólo se concentran en los niveles de pobreza, no en la construcción de instituciones que sostengan una política social que se universalice y tenga, forzosamente, un enfoque de derechos
*ARD