Puebla, Pue. En menos de un año, en Puebla han asesinado a 2 activistas, el primer caso se trata de Cecilia Monzón, abogada especializada en temas de perspectiva de género, el hecho sucedió el 21 de mayo, y el más reciente (4 de octubre) se trata de Esmeralda Gallardo, madre buscadora de Betzabé Gallardo, quien formó parte del Colectivo Voz de los Desaparecidos.
Ambas víctimas sufrieron un ataque directo por parte de sujetos armados que las siguieron, para poder dispararles y con ello terminar con sus vidas.
En el caso de Cecilia Monzón, la siguieron a lo largo de una vialidad ubicada en el municipio de San Pedro Cholula, fue perseguida por dos hombres a bordo de una motocicleta desde el Periférico, y fue alcanzada en el cruce de Camino Real a Momoxpan y Periférico, donde dispararon el arma de fuego en su contra, y tras su muerte dejó huérfano a un menor de 4 años.
VIDEO. Mujer EJECUTADA en Villa Frontera era la madre de Betzabé, mujer DESAPARECIDA en Puebla
Por estos hechos, la Fiscalía General del Estado realizó la detención de Javier López Zavala, político priista y excandidato al gobierno del estado, además de su sobrino, Jair ‘N’, supuestos autores materiales del delito y su secretario particular, identificado como Santiago ‘N’, y Silvestre ‘N’, quien presuntamente disparó el arma que acabó con la vida de la abogada.
Con relación al caso más reciente de Esmeralda Gallardo, integrante del Colectivo Voz de los Desaparecidos, fue asesinada la madrugada del martes 4 de octubre, la hoy occisa había denunciado la desaparición de su hija, Betzabé Alvarado, la cual fue vista por última vez el 13 de enero de 2021 y cuyo presunto responsable sería un narcomenudista.
En reiteradas ocasiones, Esmeralda Gallardo, expresó sus sospechas de que la joven podría haber sido víctima de trata de personas, ya que su hija desapareció junto con una amiga en Villa Frontera.
Durante su búsqueda, la madre acudió a Tenancingo, Tlaxcala, para buscar a su hija, en ese lugar un hombre le apuntó con una pistola en la cabeza y le pidió que no regresara.
Sumado a esto, Esmeralda había perdido a su esposo, quien se contagió de Covid-19 y murió, y tras su asesinato, dejó a su hijo en la orfandad a Enrique, de 12 años.
*JR