En Puebla aquellos que incurran en “violencia vicaria” serán sujetos a una pena máxima de 10 años 8 meses en prisión, entendiendo este delito como la conducta de esposos o parejas sentimentales que utilizan o manipulan a sus hijos para causar a la madre cualquier tipo de daño físico, perjuicio o maltrato.
Una vez aprobado el dictamen en Comisiones Unidas de Procuración y Administración de Justicia, Igualdad de Género y Familia, la diputada local por el PT, Mónica Silva, explicó que actualmente la violencia familiar se castiga con 2 a 8 años de prisión, de ahí que la violencia vicaria se incorporó a esta pena como una agravante que elevará el castigo hasta un tercio, es decir con dos años.
Con la aprobación inicial del dictamen este miércoles, Puebla está a un paso de tipificar la “violencia vicaria” como delito por el cual se podrá castigar al esposo o pareja sentimental por utilizar o manipular a los hijos e hijas en edad infantil o adolescente para causar a la madre cualquier tipo de daño físico, perjuicio o maltrato.
Diputados que forman parte de las Comisiones Unidas de Procuración y Administración de Justicia, Igualdad de Género y Familia, aprobaron por unanimidad el dictamen que será presentado ante el Pleno del Congreso local este viernes 14 de julio para su aprobación final.
La diputada panista Aurora Sierra, reconoció el impulso que colectivas como CAM-CAI y el Frente Nacional contra la Violencia Vicaria han dado para que esta iniciativa permita reformar entre otros, el artículo 10 de la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, así como otro ordenamiento al Código Penal y a la Ley de las Niñas, Niños y Adolescentes.
Con la cual a partir de su aprobación en este dictamen ya se reconoce la violencia vicaria como “todo acto o comisión intencional con el objeto de castigar o causar daño a la víctima a través del perjuicio, maltrato, descuido y/o manipulación de las hijas, hijos o vínculo filial con la víctima”.
Otro de los artículos a modificar en el marco jurídico, fue el 284 que aborda la violencia familiar, donde la penalidad se incrementará hasta un tercio cuando se cometa en contra de una niña, niño, o adolescente el uso como instrumento para causar daño a la madre.
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La diputada panista, Mónica Rodríguez Della Vechia expuso que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física y sexual, y más de una cuarta parte de mujeres de entre 15 y 49 años revelaron que han tenido una relación de pareja en la que ellas han sido objeto de violencia al menos una vez en su vida, y el 38 por ciento de los asesinatos de mujeres son cometidos por su propia pareja sentimental.
En la mesa, la diputada por el PT, Nora Merino Escamilla recordó a la abogada activista Cecilia Monzón, de quien dijeron ella fue víctima de este tipo de violencia vicaria que terminó siendo víctima de la “violencia feminicida” el pasado 21 de mayo.
Fue la diputada local por el PT, Mónica Silva la que hizo un llamado al Poder Judicial para que los jueces reconozcan a la violencia vicaria en los juicios de lo familiar para que den resoluciones con perspectiva de género.
Es importante precisar que al igual que en otros estados, en Puebla activistas habían propuesto castigos también para aquellos jueces, Ministerios Públicos, peritos o abogados que encubren al responsable de ejercer violencia vicaria, para que estos sean castigados con penas de 6 a 10 años además de ser inhabilitados en su cargo.
*OC