Luego de que en 2008 Britney Spears colapsara públicamente, se le asignó una tutela para controlar sus asuntos personales y comerciales, el encargado era su padre, Jamie.
Durante una audiencia, en junio del 2021, Britney se pronunció públicamente en contra del resguardo, y expresó que se sentía “traumatizada”, pues esto incluso le impedía tener hijos, situación que hoy cambió con el anunció de su embarazo.
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“No estoy feliz, no puedo dormir. Estoy tan enfadada, es una locura. Y estoy deprimida. Estoy traumatizada. Sólo quiero recuperar mi vida. Quiero terminar con esta tutela sin ser evaluada.
“Esta tutela me está haciendo mucho más daño que bien. Merezco tener una vida, he trabajado toda mi vida. Merezco tener un descanso de dos a tres años”, expresó la artista el año pasado.
La estrella pop afirmó que su padre le obligó a colocarse el DIU como control de natalidad, por lo que no podía tener un hijo con Sam, su pareja actual.
“Quiero poder casarme y tener un bebé. Tengo un DIU dentro de mí para no quedar embarazada, mi equipo no quiere que tenga más hijos”, aseguró Britney.
Tras las demandas de la artista durante septiembre de ese mismo año, se le retiró la tutela a su padre Jamie, lo que permitió a partir de entonces vivir libremente a Britney y decidir sobre su propio cuerpo.
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La tutela se disolvió por completo el 12 de noviembre de 2021, a partir de lo cual Britney comenzó a manifestar más y más su deseo de tener otro bebé.
Hoy, finalmente, el deseo de la cantante se cumplió, su tercer hijo está en camino, después de sus constantes pronunciamientos a favor de la maternidad y el sentimiento que esto le representa.
“Mis hijos son lo primero, siempre. Tengo mucha suerte de poder vivir todas las aventuras de la vida con ellos” aseguró en 2021 para la revista People. Hoy puede ejercer libremente la maternidad.
*IR