Zambada, captura o entrega, una historia digna de un "thriller"
El capo más buscado terminó en prisión, un congresista es asesinado, un gobernador queda bajo sospecha: la captura de Ismael "Mayo" Zambada tiene los elementos de un "thriller", pero hay vacíos en la historia que agravan la desconfianza entre México y Estados Unidos.
"Cuando leí la carta parecía una novela", dice el exagente de la DEA, Mike Vigil sobre un texto difundido por el narcotraficante mexicano donde asegura que fue "secuestrado" y entregado a Estados Unidos por Joaquín Guzmán López, hijo del encarcelado Joaquín "El Chapo" Guzmán.
“El Mayo” y su versión
Zambada, jefe del Cártel de Sinaloa de 76 años y quien eludió la cárcel durante décadas, llegó el pasado 25 de julio con Guzmán López a Nuevo México en un avión privado. Nada se sabe del piloto.
Desde entonces se han tejido múltiples versiones. Estados Unidos y México niegan haber planificado la operación, aunque el gobierno mexicano refirió conversaciones previas entre el "Chapito" y funcionarios estadounidenses.
En el escrito publicado por su defensa, “El Mayo", por quien Washington ofrecía 15 millones de dólares, dijo que fue emboscado cuando iba a reunirse con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, copartidario del presidente Andrés Manuel López Obrador, en una hacienda cerca de Culiacán.
Guzmán López -sostuvo- le había pedido mediar en un conflicto entre Rocha y el diputado opositor electo Héctor Cuén, quien según el capo era un "viejo amigo" y fue "asesinado" en el mismo lugar de la celada.
Pero Rocha negó cualquier "complicidad" con el cártel fundado por “El Chapo" y "El Mayo" en los años 1980 y aseguró que el día de la supuesta cita estaba en Los Ángeles, Estados Unidos. López Obrador y la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, lo respaldaron.
La Fiscalía de Sinaloa, en tanto, difundió el lunes un video que muestra a un pistolero atacando presuntamente a Cuén el 25 de julio en una gasolinera de Culiacán, reforzando su versión inicial de un presunto robo.
La trama incluye además la desaparición de dos escoltas de Zambada, según su relato, incluido un supuesto jefe policial de Sinaloa. Aunque los hechos ocurrieron en ese estado, la Fiscalía General mexicana asumió las investigaciones.
"No me entregué, me secuestraron"
Ismael "El Mayo" Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, dijo que "no me entregué, me secuestraron", en una declaración difundida a través de su abogado, Frank Pérez, reportó el medio Los Angeles Times.
Detalló que fue emboscado cuando esperaba reunirse con Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, y Héctor Melesio Cuen Ojeda, político asesinado el día de la detención del capo, junto con Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Rocha no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el sábado, dijo Los Angeles Times.
"El Mayo" especificó que "no llegué voluntariamente a Estados Unidos. No tuve ningún acuerdo con cualquier gobierno. Al contrario, fui secuestrado y llevado a Estados Unidos contra mi voluntad".
En el mensaje, el cofundador del Cártel de Sinaloa detalló que "Joaquín Guzmán López me pidió asistir a una reunión para ayudar a resolver unas diferencias entre líderes políticos en nuestro estado".
"Estaba al tanto de una disputa en curso entre Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, y Héctor Melesio Cuen Ojeda, ex congresista federal".
"El Mayo" añadió que le dijeron que también estaría presente Iván Guzmán Salazar. Este último también es otro de los hijos de "El Chapo".
En el comunicado, el capo indicó que ese 25 de julio fue al rancho y centro de eventos Huertos del Pedregal, afuera de Culiacán, "donde iba a ser la reunión".
Detalló que llegó antes de la hora pactada, las 11 de la mañana, y vio a hombres armados vestidos con uniforme militar verde, los que asumió como parte de Joaquín Guzmán y sus hombres.
"El Mayo" dijo que iba acompañado por cuatro personas de seguridad, dos de los cuales quedaron afuera del perímetro de seguridad.
"Los dos que entraron conmigo eran José Rosario Heras López, comandante de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa y Rodolfo Chaidez, miembro de mi equipo de seguridad desde hacía mucho tiempo", especificó.
“Vi a Cuén con vida”
Al caminar hacia el área de la reunión, de acuerdo con "El Mayo", dice que vio a Héctor Cuén y uno de sus ayudantes, a los cuales saludó brevemente antes de entrar a un cuarto que tenía una mesa con frutas.
"Vi a Joaquín Guzmán López, a quien conozco desde que era joven, y me hizo gestos para que lo siguiera. Confiando en la naturaleza de la reunión y los involucrados, lo seguí sin vacilar. Fui dirigido a otro cuarto oscuro".
"En cuanto entré a ese cuarto, fui emboscado", dijo "El Mayo" en el comunicado. "Un grupo de hombres me asaltó, me tiraron al piso y me pusieron una capucha de color oscuro en la cabeza. Me amarraron y esposaron. Luego me obligaron a subir a la caja de una camioneta".
Detalló que "fui sometido a abuso físico, lo que resultó en serias heridas físicas en mi espalda. rodillas y muñecas".
"Luego me llevaron a una pista de aterrizaje a unos 20 o 25 minutos de distancia, donde me obligaron a subir a un avión privado".
Para entonces "Joaquín le quitó la capucha de la cabeza y me ató con bridas al asiento". Mencionó que en el avión iban él, "Joaquín" y el piloto.
Especificó que el vuelo duró cerca de dos horas y media a tres horas. "sin ninguna parada hasta que llegamos a El Paso, Texas".
Añadió que en la pista agentes del gobierno federal estadounidense lo custodiaron.
Enfatizó que "la noción de que me rendí o cooperé es completa e inequívocamente falsa. Me trajeron a este país a la fuerza y bajo coacción, sin mi consentimiento y contra mi voluntad".
A Cuén lo mataron antes
Sobre la muerte de Héctor Cuén Ojeda, añadió que conoce la versión oficial de que fue disparado el 25 de julio en una gasolinería por dos hombres en una motocicleta que buscaron robar su camioneta, pero dice que "eso no pasó, "él fue asesinado al mismo tiempo y en el mismo lugar de donde fui secuestrado".
Añadió que Héctor Cuén "era un viejo amigo" y lamenta su muerte, además de las "desapariciones de José Rosario Heras López y Rodolfo Chaidez, los que no han sido vistos desde entonces".
"El Mayo" llamó a los gobiernos de México y Estados Unidos a ser "transparentes y brindar la verdad acerca de mi secuestro a Estados Unidos, y acerca de las muertes de Héctor Cuén, Rosario Heras, Rodolfo Chaidez, y cualquier otro que haya muerto ese día".
También lanzó un llamado "a la gente de Sinaloa a usar la moderación y mantener la paz en nuestro estado. Nada puede ser resuelto por la violencia. Hemos pasado por ese camino antes y todos pierden".
Inconsistencias en la versión de "El Mayo"
El caso Zambada ilustra que el narcotráfico "no ocurre al margen" de actores estatales, "sino que necesita de corrupción para existir y crecer", señala Cecilia Farfán, del Institute on Global Conflict and Cooperation.
La versión de"El Mayo", sería una maniobra para evitar un juicio en Estados Unidos, donde ya rechazó los cargos de narcotráfico y blanqueo de dinero, entre otros.
Argumentarían que "hubo una aplicación extraterritorial de la justicia estadounidense para impugnar un juicio", opina el consultor David Saucedo.
Pero ese supuesto "no va a tener valor aquí en Estados Unidos", apunta Vigil, veterano exagente de la DEA asignado a México en distintos períodos.
Vigil refiere el caso de un mexicano enjuiciado hace dos décadas en Estados Unidos por el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena en 1985, pese a que alegaba una detención ilegal.
Fue liberado por falta de pruebas en este crimen atribuido al cártel de Guadalajara, simiente del de Sinaloa que tiene varias facciones.
Vigil ve además inconsistencias en la versión de "El Mayo", como que "el narcotraficante más buscando del mundo" haya acudido a una cita con cuatro escoltas a encontrarse supuestamente con otros hijos de"El Chapo", enemigos suyos, para resolver un problema doméstico.
Guzmán López sí habría entregado a Zambada
Para él, la hipótesis más creíble es que Guzmán López entregó a Zambada porque estaba negociando beneficios para él y su hermano Ovidio, extraditado en 2023, y en "venganza" porque un hermano y un hijo de "El Mayo" declararon contra "El Chapo" Guzmán durante el juicio que lo condenó a prisión perpetua.
Mientras surgen otras piezas del rompecabezas, el caso parece agrietar aún más la cooperación antidrogas ante sospechas de que el gobierno mexicano asumió una actitud de "brazos caídos" para capturar a peces gordos, apunta Saucedo.
López Obrador, que acusa a la DEA de fracasar en su estrategia antidrogas, reiteró que la detención de capos no resuelve el problema y denunció un "modus operandi" de Washington para vincular gobiernos con el narcotráfico y así "someterlos".
El gobernante izquierdista, que concluirá su mandato el 1 de octubre, defiende atacar la criminalidad desde la raíz -según él, la pobreza- bajo el eslogan "abrazos, no balazos".
En medio de esas divergencias, que llevaron a limitar el papel de la DEA en México, López Obrador reconoce sin embargo que el caso Zambada ayudará "mucho a conocer todas las ligas" entre la política y el narco.
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar aseguró que Estados Unidos está cooperando con la Fiscalía General de la República (FGR) sobre el caso de Ismael "El Mayo" Zambada y Joaquín Guzmán López, con la que, dijo, hablan diariamente.
Sin embargo, reafirmó que Guzmán López se entregó de manera voluntaria a las autoridades de su país, y que "El Mayo" fue llevado contra su voluntad en un vuelo en el que, enfatizó, no participó ninguna agencia estadounidense.
"La cooperación con México en temas de seguridad sigue muy bien. Hasta en este día, operaciones, no comento lo que estamos trabajando en el día operaciones con la fiscalía, pero esfuerzos y unos casos grandes con mucha información y intercambio de información, porque así es como deberíamos trabajar como socios. Entonces, lo que se dijo en algunas redes de prensa ayer, que se había parado la cooperación, no, es falso".
"Nosotros estamos cooperando, hablando diariamente con los equipos de la Fiscalía del gobierno de México. Esa cooperación de la parte de nosotros, de la parte del fiscal Merrick Garland y su equipo, eso va a seguir", comentó.
Aclaró que no fue un avión ni piloto estadounidense el que llevó a "El Chapito" y a "El Mayo" a Nuevo México. "No se presentó ningún plan de vuelo ante las autoridades de los Estados Unidos. Y lo que estamos nosotros entendidos es que sí salió de Sinaloa y llegó a Santa Teresa, Nuevo México. El piloto no era un empleado ni fue contratado de la parte de los Estados Unidos", reiteró.
"Tenemos nosotros una muy buena cooperación con el gobierno de México, con la Fiscalía, y eso en seguro va a seguir, va a seguir también con el nuevo gobierno de la Presidenta electa Sheinbaum. Eso es la esperanza mía muy clara. En lo del segundo, lo del vuelo, ya lo que reportamos es lo que puedo reportar en este día. Hay investigaciones, tanto a aquel lado como a este lado. La Fiscalía aquí lleva la investigación, lo de México", comentó.
*BC